Poster de La madre muerta

Críticas La madre muerta (1993)

Ismael (Karra Elejalde) ha cometido varios asesinatos, pero uno de ellos, por sus devastadoras consecuencias, lo persigue constantemente. La hija de una de sus víctimas (Ana Álvarez), una niña que presenció el crimen, quedó tan afectada que perdió la cordura. Veinte años después, Ismael la secuestra con el fin de descubrir si ella lo reconoce como el asesino de su madre.

Fernando Morales Diario El País

Una película muy creativa y visualmente impresionante, a pesar de no ser bien recibida por el público. Definitivamente, ofrece una experiencia única.

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