En ocasiones, el drama televisivo es incómodamente intenso; en otras, puede ser profundamente conmovedor, y a veces, ambas cosas. 'I Am Ruth' es un claro ejemplo de esta dualidad.
Cada vez que intenta ser original y profunda, da un paso atrás y regresamos a lo mismo de siempre. Sin embargo, lo que este guion no escatima es energía.
Un drama criminal que rinde homenaje a las víctimas. Es debatible si era necesario un drama sobre este tema en 2023, pero al menos esas mujeres son retratadas con el respeto que merecen.
El caso de Jeremy Bamber es presentado con un notable rigor. La serie aborda el tema con la sensibilidad que se espera, utilizando escasos diálogos explicativos y aprovechando los silencios de manera efectiva.
Todo el mérito es de Graham por conseguir lo imposible: hacer que algo relacionado con el Brexit sea entretenido. Cumberbatch domina el desdén y el acento de Cummings.
Isaacs logra retratar los defectos de Grant sin que este resulte antipático. Simplemente se presenta como un hombre que nunca había experimentado el amor y no sabía cómo expresarlo.