Sin duda, sentimos el pavor de los actos de los nazis, pero hay una simplicidad general que mantiene esos y otros terrores a cierta distancia. Aun así, merece la pena echar un vistazo a este retrato bienintencionado.
Un thriller tenso y fascinante. Aunque Marceau es el eje narrativo, su arte no eclipsa la historia, y en ocasiones queda en un segundo plano frente a los diversos personajes y sucesos.
El encantador y conmovedor drama 'El artista y la modelo' presenta el arte, la vida y la muerte como un trío irremediablemente enredado de una manera conmovedora.
Una adaptación absorbente, resonante y profundamente melancólica que probablemente se aprecie mejor si se juzga dentro del contexto de su ambientación, mediados del siglo XX, que desde una óptica cotemporánea.
Mirren está muy bien caracterizada, hasta en los más mínimos detalles. Fionn Whitehead triunfa. El reparto secundario es bueno. Y también lo son la paleta visual de la película, la recreación de la época y la alegre banda sonora.
Sus buenas intenciones, la destreza de las actuaciones y su elegancia y sensibilidad para presentar detalles vívidos de la época compensan los tropiezos.
Dimitri Logothetis aporta la energía necesaria a la abundante acción que presenta la película. Sin embargo, el diálogo y las actuaciones son notablemente mediocres.
Es una historia potencialmente fascinante, pero este film ambicioso se ve obstaculizado por un guion flojo y una actuación protagonista de Meadow Williams decepcionante.
Aunque 'The Last Rider' puede resultar un poco hiperenfocada para el espectador menos iniciado, los entusiastas del deporte y del ciclismo profesional deberían encontrar en ella un viaje inspirador y transportador
Si bien Miller y Pollard no retratan a Ashe de manera especialmente negativa, tampoco lo muestran como un santo; lo presentan como un hombre de su tiempo con un talento excepcional. Es un homenaje apropiado.
'My name is Sara' se suma dignamente a la interminable cadena de historias basadas en el Holocausto y encuentra su camino para triunfar en grandes y pequeñas pantallas.
Una mirada elegante, evocadora y absorbente a la expresión creativa, la ambición artística, la sexualidad y el erotismo. La historia se mueve de forma competente entre los momentos clave.
Una encantadora interpretación de la supermodelo-actriz etíope Liya Kebede como Waris Dirie hace maravillas para elevar esta película irregular, ocasionalmente torpe pero a menudo absorbente.