Aunque esta película tiende a ser exagerada en algunos momentos, es el primer lanzamiento de un gran estudio en bastante tiempo que logra cautivar al espectador de principio a fin.
La película se centra principalmente en Lawrence y Zahn, quienes presentan una dinámica que resulta aceptable, aunque no lo suficiente como para justificar una secuela.
En las manos equivocadas, esta película podría haber sido un desastre. Sin embargo, la dirección magistral de Linklater logra elevar el contenido y darle un valor único.
Con una atrapante interpretación de Radha Mitchell como las dos Melindas, este ejercicio de trama dual es entretenido para ver y aún más interesante para reflexionar.
Un escaparate para sus actores. Aunque esta agradable comedia sentimental no te abrumará con su técnica cinematográfica, probablemente hará felices a los espectadores.