Frustrante y poco aterradora. No se puede negar que Wilson y Farmiga han logrado convertirse en dos de las figuras más icónicas del terror contemporáneo.
Eastwood dramatiza competentemente esta historia de perdedores basada en hechos reales con un estilo paciente y directo afín a 'Sully' y 'Changeling', pero se queda corto en matices.
Esta aventura espacial independiente y ambiciosa está repleta de personajes vibrantes y villanos espeluznantes, la mayoría de los cuales son, por desgracia, más interesantes que el propio Buzz.
'Hive' nos recuerda la importancia de honrar el espíritu indomable de las mujeres y la alegría que nos brinda el cine al mostrar cómo ese espíritu florece frente a las adversidades.
Es una de esas películas que ofrecen todas las escenas predecibles que uno puede esperar de un guion centrado en la adicción: por lo tanto, hay muy poco contenido que no sea banal o que no roce lo vergonzoso.
Con la impresionante actuación de la hija del director, Tora Hallström, en el papel principal, este biopic lleno de vida marca la diferencia entre lo convencional y lo místico.
Intenta ofrecer un giro fantasmagórico con un maquillaje decente. Sin embargo, el dominio de Koontz sobre el material es tan nulo que a veces es difícil distinguir la película del cutre-decorado de una feria del Lejano Oeste.
Un cuento tierno y poderoso que logra un tono hermoso a través de un humor irónico. Destaca especialmente la contenida y conmovedora interpretación de Anaita Wali Zada.
Una extraordinaria Angourie Rice y la estrella de 'Stranger Things' Gaten Matarazzo llevan de forma impresionante este juego adolescente con un lado oscuro.