Poster de El robo más grande jamás contado

Críticas El robo más grande jamás contado (2002)

Lucas Santos, conocido como "el Santo" (Antonio Resines), es un ladrón de poca monta que frecuentemente entra y sale de prisión. Cansado de sus robos ineficaces, sueña con llevar a cabo un golpe que lo convierta en noticia. Su esposa (Neus Asensi), una mujer comprensiva que trabaja como stripper ocasional, lo apoya. Junto a una disparatada banda de inexpertos delincuentes, Lucas decide robar El Guernica de Pablo Picasso, la obra más valiosa del Museo Nacional de Arte Reina Sofía.

M. Torreiro Fotogramas

Película saludablemente divertida, con golpes de humor inolvidables.

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