Poster de Un hombre llamado Flor de Otoño

Críticas Un hombre llamado Flor de Otoño (1978)

Lluis de Serracant es un joven abogado proveniente de una familia burguesa catalana, lo que no le impide llevar una sorprendente doble vida: durante el día se ocupa de sus responsabilidades laborales, mientras que por la noche se convierte en "Flor de otoño", un travesti que brilla en un pequeño cabaret.

Fernando Morales Diario El País

Pedro Olea logra uno de sus trabajos más destacados en esta historia que se aleja de los excesos, abordando el tema con sobriedad y sensatez. Una película curiosa.

Luis Martínez Diario El Mundo

Un cuento turbio de deseos y libertades. Todo ocurre en tiempos de la dictadura de Primo de Rivera, de la mano de una cuidada adaptación de época y un no menos brillante trabajo interpretativo.

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