Poster de Un ladrón en la alcoba

Críticas Un ladrón en la alcoba (1932)

Lily, una astuta carterista que se hace pasar por condesa, conoce en Venecia al célebre ladrón Gaston Monescu, quien también finge ser barón. Ambos se enamoran apasionadamente. Gaston roba a un aristócrata, François Fileba, y escapa con Lily antes de ser descubierto. Casi un año después, en París, Gaston roba un bolso con diamantes a la viuda Mariette Colet, pero decide devolvérselo y logra cautivarla al punto de que lo contrata como su secretario.

Charles Taylor Salon

Es una película que se siente tanto actual como visionaria, anticipándose a las tendencias de las épocas posteriores.

Mick LaSalle San Francisco Chronicle

Las situaciones abordadas son para un público maduro, y las insinuaciones sexuales son claras y contundentes. La obra destaca por su brillo dorado y las actuaciones de las actrices, que son realmente sobresalientes.

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