A nivel visual, no deja de ofrecer elementos encantadores que te dejan sin aliento. Sin embargo, como ejercicio narrativo, resulta ser bastante superficial.
Una 'West Side Story' magníficamente fiel. Una nueva adaptación espléndida y dinámicamente orquestada del musical atemporal, en la que Steven Spielberg por fin da rienda suelta al niño de teatro que lleva dentro.
Divertida, desgreñada y dispersa. Alana Haim ofrece una actuación destacada. Esta podría ser, para bien o para mal, la película más disparatada de la admirable y siempre cambiante carrera de Anderson.
Trier sigue conectado con las emociones de los personajes jóvenes. Sin embargo, la narrativa resulta confusa en su metáfora, al mismo tiempo que es excesivamente directa en su dramatismo.
Es en su extenso y serio acto final que 'The Irishman' concentra su verdadero poder y desvela sus principales intenciones. Scorsese, a sus 76 años, dirige con la vitalidad de un joven cineasta ansioso por contar su historia.
Las personas que aparecen son todas interesantes y lo que es mejor, los directores Michael Dweck y Gregory Kershaw le dan identidad visual al material.
Encuentra tanto el dolor como el ingenio más divertido en la agitada vida de un famoso poeta de la guerra, ofreciendo algunos de los diálogos más agudos y ágiles de la estimable carrera de Davies.
Se adhiere a lo básico del terror de cosas-en-la-oscuridad que hizo a 'The Conjuring' tan entretenida y tan valiosa. Sandberg saca el máximo partido a la fórmula que adopta.