Las risas y los mensajes están inmersos en una hermosa anécdota bellamente contada, en la que la importancia de lo que una persona puede dejar en otra es lo crucial y lo realmente fascinante.
Una película que nos invita a conocernos y a reflexionar sobre nuestra propia existencia, sin reservas. Destaca por las destacadas actuaciones de grandes figuras del cine.
Una película necesaria y dolorosa, tanto como la realidad misma. Se trata de una cuidadosa perspectiva del mundo de los narcotraficantes; una película para entendernos, mirarnos y reconocernos.
La sutileza del tono de la película impide que te emociones realmente, manteniendo tanto el corazón como la piel en un estado de calma, ya que todo transcurre de manera muy estable.
Se trata de una anécdota en donde la comedia, la aventura y las lecciones se mezclan en una buena apuesta que no exige comparación y que deja un agradable sabor de boca en los espectadores de todas las edades.
La trama resulta entretenida y sorprende por el nivel de comedia negra que logran los puppets, provocando carcajadas con el doble sentido y la morbosidad de varios diálogos. Sin embargo, en el caso específico de McCarthy, no hay elementos que realmente asombren.