La película parte de una premisa equivocada y utiliza ejemplos de manera indiscriminada, lo que sugiere que estos son esenciales para un discurso que nunca se desarrolla adecuadamente, resultando en un fracaso.
'Vidas pasadas' se presenta como una película encantadora. Aunque carece de profundidad y tiene momentos de cine postales, es un filme que evoca la nostalgia de los amores perdidos de la infancia y enganchará a quienes desean recordar esos tiempos.
La primera parte tiene todos los ingredientes para una buena película. Sin embargo, la metáfora resulta tan evidente que se vuelve absurda, asemejándose a una lección básica de psicoanálisis.
Mouret presenta diálogos meticulosamente construidos que evocan lo más destacado de Guitry y Allen, al mismo tiempo que rinde homenaje a una tradición del cine francés que abarca desde Éric Rohmer hasta Jean Eustache.