Un visionado dramáticamente convincente, gracias en parte al agudo ojo de Preston para los detalles, a veces extraordinarios, así como a la excelencia del reparto.
El documental de Channel 4 sobre la Reina no logra mantenerse en pie, mientras que 'Wolf Hall: The Mirror and the Light' destaca como un ejemplo excepcional de narrativa.
La primera temporada se sostiene sobre un humor absurdo y atrevido, con chistes que juegan con lo grosero, llevando a un desenlace que sorprende de manera deliciosa.