Ni la 'showrunner' Cathy Schulman ni la directora Susanne Bier pueden camuflar el hecho de que parece, a menudo, una dramatización de varias páginas de la Wikipedia al mismo tiempo.
Parece que la película se encuentra atrapada entre diferentes enfoques, sin adoptar completamente ninguno. Su narración dispersa y su estilo al abordar la vida y obra de Emily dejan claro que su mayor fortaleza radica en la actuación de su protagonista.
Durante cuatro temporadas, Morgan ha construido una telenovela altamente adictiva y sorprendentemente absurda. Esta temporada podría ser, sin duda, la más destacada de todas.
La serie es, sobre todo, aterradora. Una vez que se establece, resulta lo suficientemente cautivadora e intrigante como para mantener tu atención en todo momento.
Se toma su tiempo en encontrar su propio encanto más allá de su inspiración británica. Port y Wiseman se esfuerzan por hallar la alquimia que hacía que la obra original fuese fascinante.
'From Scratch' presenta una familia extensa, desordenada y totalmente creíble que puede vender casi cualquier frase ocasionalmente (aunque necesariamente) cursi.
Hay algo innegablemente satisfactorio en ver a Hussain presentar su propio show en el que puede poner en práctica sus conocimientos y su historia sin que nadie le critique.
Centrar una serie en el mundo docente no es un concepto innovador. Sin embargo, donde realmente destaca es al convertirse en una auténtica comedia de trabajo, al estilo de 'The Office'.