Aunque la trama pierde impulso y en ocasiones parece tambalear, la dirección visual de Guan asegura que 'Black Dog' mantenga su atractivo en todo momento.
Consigue combinar un divertido retrato de una época histórica con preguntas universales sobre si es posible construir una sociedad humana sobre los cimientos de algo que no sea la violencia.
La película evoca la inconsciente tontería característica de los grandes éxitos de los años 80. Aunque la llave de cristal no se asemeja a Missouri y Gyllenhaal no es un Patrick Swayze, el espectador podrá revivir la nostalgia de una era más simple al disfrutar de este tipo de cintas en la gran pantalla.
'Firestarter' te adormece con una falsa sensación de seguridad antes del mayor susto de la película, que se produce cuando pasan los créditos y te recuerdan que se pagó dinero de verdad para hacerla
Una historia neo-noir por excelencia no estará realmente acabada hasta que el público proyecte sus propios miedos en los rincones oscuros que no consigue iluminar.
Una sorprendente joya de enero. La continuación de Christian Gudegast supera las carencias del thriller previo, convirtiéndose en una experiencia mucho más amena y satisfactoria de lo que se anticipaba.
Tiene un ritmo similar al de una típica película de negocios que podrías ver en un vuelo. Resultaría ideal como entretenimiento para una familia victoriana que se aburre durante un largo viaje campestre.
La película de terror, al enfocarse en los niños como seres humanos, logra formular preguntas profundas. Sus respuestas, en muchas ocasiones, se perciben como una crítica a la sociedad actual en lugar de responsabilizar a individuos, ya sean inocentes o no.
A pesar de no ser tan original como otras películas que busca replicar, resulta ser un fuerte recordatorio del destino trágico y absurdo que el sistema de vivienda actual nos está llevando.
Es a la vez una brillante sátira de la decadencia que conlleva la riqueza y una sombría exploración de cómo los seres humanos luchan por despedirse al final de su vida.
El encanto del juego radica en su habilidad para promover la socialización. 'Eephus' capta esta esencia, y su guion fluye al compás de un emocionante partido de béisbol.
'Greedy People' no es exactamente una obra maestra ni un clásico de culto al estilo Coen. Sin embargo, si buscas entretenimiento para un rato en verano, podría valer la pena echarle un vistazo.
La nueva versión de Wade Allain-Marcus de la película de 1991 protagonizada por Christina Applegate no es tan mala como otros remakes que se pueden encontrar en streaming, pero aún así no logra ofrecer una razón convincente para su existencia.