Es realmente asombroso que 'Falcon Lake' sea la obra de una directora novel. Le Bon demuestra una comprensión magistral de la composición y el ritmo de los planos.
Toda ella es una prueba viviente de que a la saga le queda un montón de gasolina en el depósito, y que deberíamos estar emocionados con respecto a la inevitable 'Scream VII'.
Llega con un nivel de absurdo que ningún cinéfilo que se precie toleraría en los otros 11 meses del año, pero podría ser exactamente lo que necesitas para mitigar el dolor de una dolorosa derrota en los playoffs de la NFL.
La gran ironía es que, para una película que hace tanto hincapié en aprovechar al máximo los 'años dorados', pide a sus espectadores que desperdicien 96 minutos de los suyos sin ofrecer mucho a cambio.
Acaba siendo más una reconfortante comedia romántica y una carta de amor a Los Angeles que una sátira verdaderamente mordaz, pero tendrías que odiar la diversión para quejarte de ello
Aborda con lucidez los retos a los que se enfrenta un artista de talento en circunstancias desfavorecidas, alejándose siempre de las narraciones simplistas y acercándose a la realidad.
A pesar de la sencilla cuestión que subyace en la película, Carax se centra más en combinar imágenes y sonidos impactantes que en ofrecer una auténtica visión del hombre que los crea.
Lo que podría haber sido una narrativa común en Netflix, en manos de creadores más inexpertos, se transforma en una profunda exploración sobre el sentido de pertenencia, con menos clichés de lo que se podría anticipar.
El primer trabajo como director de Shane Atkinson refleja la influencia de los hermanos Coen, pero cuenta con un elenco tan divertido que se sostiene por su propia fuerza.
Consigue combinar un divertido retrato de una época histórica con preguntas universales sobre si es posible construir una sociedad humana sobre los cimientos de algo que no sea la violencia.
'Firestarter' te adormece con una falsa sensación de seguridad antes del mayor susto de la película, que se produce cuando pasan los créditos y te recuerdan que se pagó dinero de verdad para hacerla
Una historia neo-noir por excelencia no estará realmente acabada hasta que el público proyecte sus propios miedos en los rincones oscuros que no consigue iluminar.