Una película confiada y en ocasiones sofisticada, aunque solo resonará con aquellos espectadores que logren relacionarse con ella a través de su intelecto.
Un ejercicio pasable del subgénero de profesores inspiradores. Al final, Hundert quizá sea recordado por sus pupilos, pero la película se olvidará rápidamente.
Se desarrolla con tanto sentimiento que verla a veces puede ser realmente difícil. Pocas películas de esta magnitud y escala se han creado con tanta pasión.