Es maravilloso apreciar el esplendor de su asombrosa animación, aunque la magia de 'Coraline' resulta más fácil de admirar que de disfrutar con entusiasmo.
Bien escrita, con estupendas y convincentes interpretaciones. Hábilmente evita el sentimentalismo y ofrece una observación de la vida de los personajes con múltiples capas y totalmente creíbles.
Mae Whitman es lo mejor de la película; esta divertida actriz merece un material de mayor calidad que lo que se presenta en esta oda superficial y tópica a la autoaceptación adolescente.
Un evidente recurso para provocar lágrimas. Aun así, 'The Fault in Our Stars' presenta al público un romance adolescente literario, lleno de exuberancia e inteligencia.
No hay nada malo en los cuentos de hadas, pero no tienen porqué ser formulaicos. Una película como esta se habría beneficiado de una mezcla entre fantasía y creatividad.
Una tiene que preguntarse sobre el estado mental de un director de mediana edad que, de forma reiterada, busca material sobre la amoralidad y promiscuidad de unos adolescentes con poco que decir.
Las actuaciones son destacables y las escenas de fútbol resultan emocionantes. Sin embargo, su superficialidad la aleja de la conmovedora historia que podría haber logrado.