La serie aún no define completamente la dirección de su personaje, sin embargo, Ko brilla y se destaca cada vez que tiene la oportunidad de participar.
La serie busca ser un escaparate para Fillion, aunque lo logra solo de manera parcial, sin dejar de lado a los demás actores. Sin embargo, el episodio piloto no resulta gratificante.
Una serie que se destaca por su atractivo, en gran parte gracias a las actuaciones estelares y a unos diálogos que, aunque pueden ser un poco exagerados, resultan ágiles y entretenidos.
Una representación convincente de un episodio relevante por una causa significativa. Valoro su dedicación hacia varios actores menos reconocidos del episodio original.
El elenco de voces es impresionante y la animación es visualmente atractiva, con una mejora notable a lo largo de los 10 episodios. Además, cuenta con detalles narrativos que enriquecen de manera efectiva su universo.
Su mundo tiene una buena estructura, pero la historia de amor resulta poco profunda. La serie parece querer abarcar demasiados elementos a la vez, lo que le resta coherencia.
Se siente limitada debido a un guion que no refleja el potencial del talentoso elenco. Presenta observaciones sociales que recuerdan a las comedias de CBS de los años 70.
Para los amantes de la ciencia ficción, la serie puede resultar interesante. Sin embargo, en mi experiencia, al llegar al sexto episodio, perdí el interés por los personajes y el universo que los rodea, así como la curiosidad por lo que podría suceder.
No atraerá a un público más amplio fuera de su propuesta específica. La mayoría de las interpretaciones carecen de impacto y no logran quedar grabadas en la memoria.
Más extraña y superficial que misteriosa, esta primera temporada no cumple del todo. No estoy seguro de cuánto tiempo más invertir en esta serie sin sustancia, especialmente cuando hay otras opciones en la televisión que son mucho más cautivadoras.