Pese a todos sus problemas, es una película sólida, aunque no se puede considerar una obra maestra. Logra mantener nuestra atención con su sencillo argumento de terror y ciencia ficción.
Su estructura es buena pero no está a la altura. La puesta en escena y la ambientación son interesantes, pero el argumento es confuso y ofrece poco terror como para que la película sea satisfactoria.
Tan deliciosamente absurda como sugiere su título. Es, al mismo tiempo, una diversión estruendosa y espantosamente gore. Es una película de visión obligada para cualquier fan de las comedias de terror.
Tiene algo que ofrecer a los aficionados de todos los géneros del terror. Habla de política, pero es accesible para aquellos a los que no la mezclen con el cine. Es sangrienta, pero no excesiva.