Mezcla satisfactorios pedazos de diversión, lágrimas, viajes, romance y lecciones de vida en un atractivo envoltorio cuyas dos horas pasan más rápido que muchos entretenimientos adultos.
No aprovecha una premisa entretenida, que parece hecha para un tratamiento satírico y es ejecutada con una semiseriedad extraña que los personajes no son capaces de contrarrestar por su falta de profundidad o interés.
Aunque se queda un poco corta como drama humano, la última película de Szumowska es totalmente satisfactoria como apreciación de la naturaleza como adversario magnífico.
Mitchell es quien más destaca en su papel, haciendo de Dora una personalidad convincente, de carácter fuerte y no exenta de calidez maternal. En cuanto a 'Blueback', es tan encantadora como lo es un pececillo.
Carece de la chispa que le habría dado alas como una película de autor atractiva o como un producto televisivo de calidad. No obstante, esta adaptación es elegante y satisfactoria dentro de sus límites.
Sombría y lustrosa de forma cautivadora. A la gente le suele gustar el terror gótico por la atmósfera, no tanto por el esqueleto narrativo. 'The Lodgers' no tiene demasiada carne en ese esqueleto.
El best-seller internacional de Markus Zusak 'La ladrona de libros' ha sido llevado a la pantalla con una tranquila eficacia y un escrupuloso buen gusto por el director Brian Percival y el guionista Michael Petroni.
Los personajes carecen de profundidad y la película se basa en sustos simplistas, priorizando un ritmo acelerado sobre la creación de una atmósfera envolvente.