El magnífico debut de Anita Rocha da Silveira captura el revoltijo de deseos y miedos que experimentan los niños que son sexualmente inexpertos. A la vez atrevida y críptica.
Un drama bien elaborado, aunque no del todo satisfactorio, cuyo estudio de los personajes intriga, pero al final, resulta frustrantemente poco desarrollado.
Un potente drama que ofrece una perspectiva a la vez punzante y ambivalente sobre una protagonista cuya rabia indiscriminada desafía sin anular la empatía del espectador.
Mezcla satisfactorios pedazos de diversión, lágrimas, viajes, romance y lecciones de vida en un atractivo envoltorio cuyas dos horas pasan más rápido que muchos entretenimientos adultos.
No aprovecha una premisa entretenida, que parece hecha para un tratamiento satírico y es ejecutada con una semiseriedad extraña que los personajes no son capaces de contrarrestar por su falta de profundidad o interés.
Aunque se queda un poco corta como drama humano, la última película de Szumowska es totalmente satisfactoria como apreciación de la naturaleza como adversario magnífico.
Una película decepcionante que se convierte en un esquema a medida que intenta ser más seria. Ni Mackie ni Dornan logran hacer que este material funcione, aunque aportan un poco de encanto y sinceridad.