El espectador desprevenido puede andar medio perdido en medio de estas andanzas hollywoodenses que tienen a su favor el buen ritmo y una razonable andanada de gags bastante eficaces.
Film que intenta ser más elaborado que el original y termina siendo el tipo de comedia, que si bien se disfruta amablemente, a nivel humorístico daba para mucho más.
Las actuaciones de Hayes, Diamantopoulos y Sasso, así como el exitoso revival de algunas rutinas originales, no logran equilibrar el homenaje nostálgico y distorsionado que los Farrelly rinden a Los Tres Chiflados.
El guión se basa en una historia real pero tiene todos los lugares comunes del caso. Sin embargo, a pesar de la evidente presencia de estos clichés, la película ofrece actuaciones carismáticas por parte del elenco femenino, comenzando con Kristin Scott Thomas.
Las coloridas imágenes del carnaval litoraleño y la convincente actuación del protagonista, Walter Rodríguez, no alcanzan para que la película convenza del todo.
El tratamiento de este argumento es un poco elemental, pero no carente de situaciones dramáticas intensas, de buenas actuaciones y hermosos paisajes bien fotografiados.
El resultado es brillante, uno de esos escasos thrillers que logran generar tensión a pesar de que el espectador conozca la resolución de los acontecimientos.
Ellis se coloca al nivel de grandes maestros como Jean Pierre Melville o Andrzej Wajda, quienes han narrado historias de resistencia con un enfoque meticuloso en la historia, un tono oscuro adecuado y una representación de la violencia desprovista de épica.
Si bien lo que se narra tiene sus puntos atractivos, no siempre es así, y hay muchas situaciones que se repiten sin necesidad y que atentan contra el ritmo del conjunto.
Es una excelente comedia dramática con una historia original, muy buenas actuaciones y tal vez demasiados hilos argumentales que, de todos modos, logra unir razonablemente bien.
Está muy bien filmada y actuada, y aún cuando pueda parecer totalmente exótica, las canciones árabes son excelentes. Lo que hace que este fim sea altamente recomendable.
El apego a la corrección política y al melodrama del director impiden que el film levante más vuelo, aunque lo importante del tema y todas las actuaciones ayudan a recomendarlo.
El film está bien narrado y filmado con rigor, por lo que se ve con interés. Sin embargo la corrección política y el desenlace conciliador no ayudan a que el asunto tome demasiado vuelo.
Pese a cierto esnobismo en el cine de arte del director, la historia real en la que se funda y las actuaciones son los puntos fuertes de esta película, que, a pesar de ser terrible, realmente merece ser vista.