La televisión brilla cuando logra establecer una conexión emocional y 'Grey's Anatomy' demuestra esta habilidad, incluso en sus momentos más críticos, lo cual supera lo que muchas series más fuertes pueden lograr.
Lucy muestra al público que las mujeres pueden ser increíblemente cómicas cuando realizan papeles diferentes a los típicos que suelen asumir, como ser las que regañan o arruinan la diversión.
Raines no logra profundizar en la oscuridad necesaria de la trama. Se centra demasiado en la interacción del detective principal con la víctima y sus colegas, lo que resta impacto a la historia.