Divertida, inmersiva y con mucho corazón, la película del verano va sobre tornados. La trama es entretenida y sólida, los momentos tiernos no resultan empalagosos y los tornados se muestran de forma impresionante.
Un drama social de la generación Z que no juzga a los adolescentes, ofreciendo una mirada respetuosa hacia las nuevas generaciones. Aborda temas relacionados con el sexo de manera adecuada y sensata.
Enseña una bonita reflexión sobre el valor de las personas al mismo tiempo que nos saca una sonrisa. Perfecta para ver en familia y salir contento del cine.
Se necesita maestría, tacto y talentos como los de Valerio Mastandrea, Vinicio Marchioni y la hipnótica Romana Maggiora Vergano para narrar de manera tan justa y a su vez atípica historias tan delicadas.
Lo que tiene de cursi es lo que hace de Arthur una película tan encantadora. Es esa acción mezclada con el sentimentalismo lo que acaba haciendo de ella un largometraje tan fácil de disfrutar.
La historia de España es conocida, y la de Iván merece ser vista. Además, Poga vuelve a brillar en el papel de un personaje con escasa ética, un rol que le sienta como anillo al dedo.
La adaptación del clásico de Dumas sigue maravillando por su impecable narrativa y su capacidad para atraer al público. El reparto es digno de elogios, aportando profundidad y carisma a los personajes. Sin duda, una obra que merece ser vista.
Divertida comedia un tanto diferente a las que suelen triunfar en épocas veraniegas. Malena Alterio se muestra encantadora en su papel, mientras que José Corbacho destaca y se adueña de la escena cada vez que aparece.
Es más de lo que aparenta. Los colores pastel transforman la narrativa en un cuento de hadas, Guallar resulta encantador y Miguel Ángel Muñoz es irritantemente memorable.
Se pueden realizar películas adolescentes con un enfoque serio. No transformará el género, pero se siente la habilidad de Wallace como directora y guionista, lo cual es digno de apreciación y, especialmente, establece un interesante punto de partida.
Una comedia musical cargada de canciones de rock originales, que incluye una emotiva balada de desamor de Mota. Aquellos que visiten el cine buscando risas, probablemente encontrarán lo que buscan.
En la cabina de grabación de la RTLM, la película explora de manera profunda las distintas facetas de la barbarie, brindando un recordatorio esencial e impartiendo una valiosa lección.
Carmina Barrios es la suegra que España necesitaba, pero es la única atracción de la película. La comedia no resulta tan divertida ni tan entretenida como podría haber sido.
Una juventud rescatada, para no pensar mucho y reírse un rato. Entretenida y llena de los clichés que esperábamos ver, consigue que pases un buen rato y salgas contento del cine.
