Portman brinda una actuación impactante y memorable, comparable a su papel en 'Black Swan', en una sátira subversiva de Corbet. Esta película fusiona de manera única la crítica social con el melodrama, creando una experiencia visualmente deslumbrante.
La trama de la película carece de cohesión, y las escenas de sexo, a menudo muy explícitas, están constantemente acompañadas de una música rock excesiva.
Es un híbrido intrigante, que combina elementos del típico realismo social británico con florituras más expresionistas, reflejando las convulsiones y los rápidos cambios de humor de Lily.
Tamer El Said captura la esencia de su entorno de forma orgánica, presentando la historia como un diario de viaje lleno de poesía. La emotiva actuación de Khalid Abdalla eleva aún más la experiencia cinematográfica.
Lo más destacado son las persecuciones, explosiones, engaños y traiciones, presentadas a un ritmo tan acelerado que resulta difícil notar las debilidades de la trama.