Una película que intenta ser encantadora pero falla en su credibilidad. A pesar de su falta de profundidad, las actuaciones de Matthew Broderick y Annabella Sciorra logran ofrecer un toque simpático que le da un pequeño respiro.
A pesar de no alcanzar el nivel de 'Terminator 2', esta nueva aventura futurista se presenta como una opción entretenida que conquista a los espectadores.