Una tragicomedia española honesta, aunque algo carente de inspiración. Es un viaje que tal vez valga la pena experimentar, pero que no desearías repetir.
Reconstruye 'Carrie' con conceptos innovadores acerca de la política en los institutos, lo que lo convierte en uno de los mejores episodios de la segunda temporada.
Los fans más acérrimos del mangaka podrían sentirse ligeramente decepcionados por la manera en la que se ha hecho esta adaptación, pero contiene una buena dosis de memorable horror desagradable.
Un surtido de episodios variado y de gran calidad que explora temas importantes a través de historias inteligentes y a menudo un impresionante aspecto visual.
A través de unos efectos visuales impresionantes, una imaginación desbordante y un gran entusiasmo, transforma una sencilla historia de amor en un verdadero festín para los sentidos.
Cuando el surrealismo se utiliza de manera efectiva, permitiendo que sus carismáticos personajes se diviertan, esta peculiar propuesta de Quintel se vuelve realmente valiosa.
Un intento fallido de relatar una historia real, que carece de la necesaria perspectiva para resultar interesante y no presenta el ritmo adecuado para generar emoción.