Se acerca a la obra maestra. Con talento, hondura, diálogos excepcionales y mucha inteligencia, Mungiu realiza la mejor disección hasta la fecha sobre el asenso de la ultraderecha en Europa. Es un peliculón.
Una aventura épica con robots entrañables que evoca la esencia de los clásicos de los años 80. A pesar de que carece de originalidad, logra ser una experiencia entretenida.