Sus guionistas han creado un universo bien articulado con unos escenarios distintos y unos personajes convincentes, con los que te puedes identificar, entregados a una emocionante búsqueda de la redención.
Más allá de algunos chistes divertidos y de un poco de comedia visual, no hay mucho que realmente atraiga a los adultos; sin embargo, los niños estarán bien entretenidos.
Con una mezcla de golosinas visuales retro para los adultos y una historia accesible y excitante para los chavales, la película crea una red amplia y seductora.
Aunque Landon y el co-guionista Michael Kennedy se aferran a un concepto prometedor, la película se ve saturada de clichés y lecciones de vida repetitivas, lo que resulta en una pérdida gradual de diversión en la trama.
Los entusiastas del género fliparán con el creativo homenaje de Todd Strauss-Schulson a los slasher clásicos, que respeta las convenciones habituales del horror mientras introduce una traviesa perspectiva contemporánea.
La tercera película de Leena Yadav es un cuento moral contemporáneo que critica el tratamiento a menudo duro hacia la mujer en ausencia de normas sociales igualitarias.
DeNucci demuestra tener un gran sentido para capturar los detalles de la época. Sin embargo, la película no alcanza el nivel estilístico de sus predecesoras más innovadoras.
Winston Azzopardi tiene habilidad para manejar un yate de lujo. Sin embargo, el ritmo de la película no destaca, y el guion, coescrito por Joe Azzopardi, resulta repetitivo y predecible.
'Linsanity' reafirma que las mejores noticias deportivas provienen de historias complejas que se pueden narrar. Estas historias se ganan el respeto y la admiración a través de las luchas y los logros personales.
Todos estos elementos ayudan a la película a superar un llamativo déficit de desarrollo de los personajes y de profundidad argumental. En este caso, es el subidón lo que vende, y de eso 'Gran Turismo' tiene bastante.
Esta propuesta histórica ofrece una celebración interesante y accesible de los orígenes modernos del deporte [golf], potenciada por lugares sorprendentes y un reparto sobresaliente.
Vardalos equilibra comedia y emoción, y su familiaridad con el entorno cultural, así como su afinidad con el extenso reparto, dan sus frutos en la pantalla.
Llena de clichés de las comedias románticas y situaciones totalmente estúpidas, la historia es tan desagradable que su irracionalidad se vuelve casi secundaria comparada con sus inútiles intentos por demostrar que los opuestos se atraen de verdad.