El trabajo de Ryan permite que la película se centre en lo importante, incluso pese a los defectos que tapa en el proceso. Por suerte, la dirección de Garbus permite que las partes más importantes sean muy interesantes.
Ridícula, excesiva y espectacular, esta película alcanza niveles que otras no se atreven a explorar. En un año con pocos estrenos en cines, resulta irresistible dejarse llevar por la completa dedicación a la visión de su autor.
'Kid Cosmic' busca ser un puente de conexión, invitando a todos a participar en su mundo. Ojalá los pequeños espectadores también puedan replicar esa apertura y hacer lo mismo en sus vidas.