El resultado final se siente más como una mala copia de 'Trek' que como una auténtica parodia. Es un intento de rendir homenaje de manera humorística, pero se desdibuja en el camino. La película confunde más de lo que realmente logra entretener.
Es difícil de disfrutar, presenta errores evidentes y resulta excesiva, especialmente si se compara con lo que fue una película realmente divertida y emocionante.
Podría haber salido muy mal, pero Campos se esfuerza por aportar algo más a la historia que sus predecesores. Lo más ingenioso es que él hace del documental original una parte de su trama.
La película cuenta con varias escenas que, por sí solas, son realmente fascinantes y están interpretadas de manera excepcional. Sin embargo, estos momentos se ven a menudo perjudicados por los saltos temporales y el estilo de montaje.
'Succession' es aburrida y monótona, con un guion que deja mucho que desear. La falta de empatía hacia los personajes, que resultan odiosos, dificulta cualquier tipo de conexión con ellos.
La auténtica estrella de esta película es la ola gigante que cubre la Estatua de la Libertad. Esa ola merece un Oscar a mejor actor de reparto. Incluso 12 años después, los efectos siguen siendo impresionantes.
Lo que hace que merezca la pena devorarla de una sentada es lo mucho que profundiza en la celebración del atletismo. Plantea preguntas sobre quién merece estar 'en la tarima', y cuánto dolor equivale a un trofeo.
A pesar de contar con un reparto y un creador destacados, 'A.P. Bio' resulta algo decepcionante. No logra ser lo suficientemente convencional ni lo bastante peculiar para mantener un tono coherente.
Reforzado por excelentes actuaciones, este filme ofrece un viaje fascinante que sigue una estructura convencional hasta que da un giro inesperado, logrando impactar y satisfacer al espectador.
La primera temporada es un verdadero escaparate para el humor astuto de Hiddleston. Con un ritmo divertido y ágil, evoca la esencia de las comedias más desenfadadas de Marvel, como 'Thor: Ragnarok' y 'Ant-Man'.
El ritmo en la narrativa es lento y la reunión de los héroes se hace esperar. Además, la química entre ellos es casi inexistente. Puede que solo convenza a los fanáticos acérrimos de Marvel que deseen ver a este cuarteto en pantalla.
Quinto es un médico atípico que logra resultados sorprendentes en pacientes con condiciones poco comunes. Aunque la premisa parece prometedora, la ejecución es decepcionante y carece de emoción.