Si se valora la calidad, está ahí. No sólo como película internacional, simplemente como película genial. Veremos si obtiene el reconocimiento que se merece.
Es muy cautivadora, presenta una fluidez más típica de un drama coreano que de una película convencional, y trae consigo detalles adicionales que enriquecen la experiencia.
Repleta de artes marciales, momentos sorprendentes y armas de fuego explosivas –tanto en volumen como en variedad– es un festín vibrante para los amantes de la acción.