Una mirada hilarante a una cena familiar tumultuosa y cargada de política. Esta película es relevante, oscura y divertida, mostrando cómo Barinholtz evita caer en el cinismo.
Las imágenes que enriquecen el mensaje multifacético de la película se sienten naturales, lo que hace que 'Tiempo compartido' sea una obra cinematográfica excepcional.