Ofrece sustos intensos sin gracia alguna, además de crear una tensión que pone los pelos de punta, aunque esto sólo ocurre tras un inicio algo tedioso.
Al final, es un desastre rancio y repetitivo que toma prestado en gran medida de todas las películas de zombis y extraterrestres dignas de imitación, con un resultado aburrido.
Después de desarrollar la historia por completo y luego descender hacia el final, solo queda una pregunta: ¿Realmente nos importa lo que está sucediendo?