'Tiny Beautiful Things' busca provocar emociones intensas, y aunque presenta varios momentos conmovedores, a veces sus manipulaciones emocionales son excesivas. Si deseas una experiencia que te haga reflexionar y llorar, esta serie puede ser para ti.
Ni siquiera Meryl Streep puede rescatar este complicado drama ecológico. A pesar de contar con un elenco impresionante que ofrece actuaciones destacadas, la serie se ve afectada por un caos narrativo que la hace poco atractiva.
Una serie que avanza con tranquilidad, presentando a personajes que parecen oficinistas sin energía, y con diálogos que recuerdan a un cuento infantil. Carece de tensión dramática.
Una película tensa y compleja. La actuación de Hartnett aporta a Hoffman un miedo palpable y creíble, que se intensifica de forma corrosiva desde el principio, brindando un impulso extraordinario a la narrativa.
Es extrañamente pesada y con una estructura ligeramente simplista. Sin embargo, lo que hace muy bien, y mejor que la mayoría, es captar tanto los detalles como la magnitud del duelo.
Lo que distingue a esta obra es la profunda tristeza que emana, la cual añade un peso emocional significativo, superando así la simple acumulación de sus elementos narrativos y giros argumentales.
Una perspectiva del relato de Dickens que indaga en la melancolía de esta época, resaltando a aquellos corazones desdichados que, a pesar de su tristeza, descubren destellos de alegría y se cuestionan sobre quién realmente merece experimentar un poco de felicidad.
Es como 'Line of Duty' pero en su versión más intensa y de mayor calidad. Cada episodio ofrece una hora de narrativa sobria y precisa, sin un solo plano desperdiciado.
Inteligente, ambiciosa y anárquica. Todas las interpretaciones son excelentes, pero Brown como Dante, en su primer papel protagonista, brilla con luz propia.
Una aspirante a cantante enfrenta desafíos en su camino hacia el éxito, el amor y diálogos que apenas se sostienen en un drama repleto de exageraciones y sin sustancia.
El espectáculo es realmente impresionante y la información que proporciona es muy valiosa. Sin embargo, al concluir, puede que te quede la sensación de que podrías haber recibido algo adicional.
Capaldi y Jumbo brillan como individuos, pero su unión es realmente cautivadora. Las preguntas profundas y la sutileza con la que se abordan a través de los personajes hacen que la experiencia merezca la pena.
Mitchell brilla una vez más. El reparto secundario cumple con lo que tiene a mano, y estoy seguro de que cualquier espectador que decida ver la serie sentirá que su tiempo ha sido bien empleado.