Adivina quién viene a cenar... y a quedarse. Es un film que provoca risas, aunque no de forma desbordante. Si bien no se trata de una obra maestra, logra entretener y generar momentos gratos.
'Hello, My Name Is Doris' emplea con astucia la comicidad de su excéntrica protagonista para contar una historia de amor poco convencional, ofreciendo una perspectiva fresca y entretenida que destaca en el género.
Es intrigante y misteriosa, con momentos de amarga comedia. Emotiva, la historia presenta una Rusia encantada, repleta de fantasmas y equios de muertos que la envuelven.
Una película que destaca por su exuberancia visual y un enfoque no convencional que se aleja de los estándares de Hollywood. La banda sonora eleva la experiencia, haciendo que sintamos que somos parte del sueño o la pesadilla de otro. Coppola presenta una historia que exige más de los espectadores, lo que refleja una renovada fuerza artística.