Para aquellos demasiado jóvenes para haber experimentado el tsunami de celebridad y contradicción que fue Ali, será una revelación. Para los que estaban ahí, es una máquina del tiempo con guantes de boxeo.
Gyllenhaal aprovecha excelentemente su atractivo de galán. Salim desempeña su papel con gran efectividad. Sin su actuación, la película no podría sostenerse.
'Secret Headquarters' es inconsistente, pero siempre vivaz. Hay momentos de verdadero ingenio, aunque no el suficiente como para compensar las secuencias de acción, cansinas y algo confusas.