La franquicia está diseñada para asombrar a los más pequeños y tocar el corazón de los adultos. Cualquier otro aspecto que presente es algo que no se anticipa de una franquicia de tal magnitud económica, lo que la hace aún más fascinante.
A pesar de que Hopkins y Pryce tienen numerosos intercambios de diálogos en cuatro idiomas, estos no aportan mucho al contenido. La película, en general, tampoco aporta sustancia.
La película resulta ser un verdadero vacío; cada espectador encontrará en ella lo que desee. ¿Realmente cambiará el cine de superhéroes? ¿Es una obra de relevancia? ¿Tiene posibilidades de ser nominada a los Oscar? Es risible simplemente pensarlo.
La historia nos muestra a una mujer excepcional y su obra transformadora. Dyrschka dirige con elegancia y sin apresurarse, permitiendo que los momentos clave se desarrollen de manera natural.
Es una película perfectamente aceptable que se ve elevada por el amor descarado que profesa Hamm a lo kitsch y por las interesantes actuaciones de Sudeikis, Judy Greer y Corey Stoll.
Cuando todo hace clic, es apasionante. E incluso cuando no todo funciona a la perfección, hay suficientes cosas en cada escena para mantener nuestro interés.
