Un entretenimiento eficaz. En Hollywood no hay muchas ideas nuevas circulando por los estudios, por lo que no se puede exigir a estas mascotas que sean particularmente originales.
Lo que destaca en la película protagonizada por Alexander Skarsgård es la aventura. El despliegue visual es grandioso, con efectos que permiten a Tarzán saltar de liana en liana, animales animados, momentos de humor, suspenso y, fundamentalmente, una gran dosis de aventura.
Sin ser un dechado de imaginación, 'Rock Dog' entretiene la casi hora y media que dura, tiene gags para todas las edades, algo de rock y personajes entrañables. Si va, no sentirá que le metieron el perro.
No tiene el corazón característico de las películas de Pixar, pero cuenta con el humor ingenioso propio de DreamWorks. Presenta una abundancia de chistes visuales y de doble sentido, acompañado de una paleta de colores vibrante y radiante, y una historia tan breve como los personajes que la protagonizan.
Si hay un problema con 'Norm y los invencibles' es que se vuelve tediosa. Los chistes resultan anticuados y ni Norm ni los invencibles logran provocar risa; más bien, parecen inocentes o tontos.
El Principito, la película, tiene mucha emoción, Osborne supo cómo trasladar la pureza de la historia y de los personajes aunque haya tenido que abreviar.
Como drama, 'Everest' resulta extenso. Y en su faceta de película de aventuras, carece de la espectacularidad necesaria. No se puede considerar un híbrido, ya que cuenta con momentos que provocan cierta emoción y, justo antes del final, se vuelve realmente conmovedor.
La trama combina muy buena acción y emoción genuina. Puede no haber nada nuevo bajo el sol, pero la renovación, o el regurgitar, no están mal vistos si tienen buen olor y color como aquí.
Maléfica tiene una trama bien construida, no se limita a ser una colección de escenas sin sentido y, sobre todo, presenta un personaje central cautivador, interpretado magistralmente por Angelina Jolie.
Es una película símil mamut, en la cual visualmente no hay objeciones, pero lo que le quedó en la cabeza, en la mesa del guión o en la edición fue más carnadura a sus personajes.
Visionario, Cuarón no se expresa desde un púlpito ni impone una línea directa. Como director, sabe entretener y al mismo tiempo permite la reflexión. Al igual que Kubrick y Spielberg, Cuarón destaca por su capacidad única en estos tiempos.