A diez años de su fallecimiento, "Lo que se dice un ídolo" rinde homenaje al legado del inigualable humorista, llevando a la pantalla su ingenio y humor característicos.
Juliette Binoche logra expresar con profundidad las emociones de su personaje, una fotógrafa de guerra, en "Mil veces buenas noches". Sin embargo, la trama pierde fuerza cuando se introduce el conflicto familiar.
Un actor popular entre los jóvenes, un excelente equipo de producción y un reparto destacado, así como un título y un guionista de prestigio, son aspectos que hacen atractiva esta película, a pesar de la controversia en la adaptación.
Intenta ser una semblanza de dos de las 40.000 universitarias que se ganan la vida como prostitutas en Francia, sin mayor crecimiento dramático ni precisión narrativa.
Hay momentos destacados y una sátira que apaga cualquier posibilidad de sentimiento, además de una observación irónica que puede relacionarse con diversas narrativas de contexto político.
Se pasa un buen rato, con linda gente, paisajes y música, se refresca el recuerdo del viejo humor inglés, irónico y ligero, que hoy poco disfrutamos, y se aprende algo.
La idea y su resolución muestran un buen potencial, pero la ejecución visual podría ser más pulida. Además, tanto el guión como el tono general de la obra requieren ajustes para alcanzar su máxima efectividad.
Es una película con una trama que parece simple, pero que ofrece reflexiones profundas y cuenta con dos actuaciones que son simplemente sobresalientes.