'Aftersun' es una experiencia sensorial intensa y, al mismo tiempo, dolorosamente melancólica. Además, se posiciona como uno de los debuts más sobresalientes presentados en el Festival de Cannes en años.
Con una serie de interpretaciones muy emotivas por parte de su reparto, se trata de una obra de época angustiosa, aunque francamente sobria, que se completa con muchos de los tópicos más habituales del género.
El ojo que tiene Guadagnino para lo táctil, actualmente insuperable en el cine, es lo que hace que la película funcione. Es complicado cuestionar una obra realizada con tanta destreza y habilidad.
Todo el crédito debería ser para Burns, guonista habitual de Soderbergh, que ha realizado un magnífico trabajo trasladando la densa ficción de Jake Bernstein sobre un fiasco en un viaje tan animado y cinemático.
El nuevo drama japonés 'Small, Slow But Steady' resulta ser una película serena y sencilla, tal como indica su título. Sin embargo, sorprende con giros inesperados dentro de su narrativa.
Probablemente sea su película más accesible. Parece que Miike por fin ha dominado su lado más experimental para ofrecer una muestra de su lado más divertido.
Una de las cosas más entrañables de las películas de Wiseman, sobre todo últimamente, es su cortés negativa a permitir que los responsables, por bienintencionados que sean, definan sus instituciones.
No es para los de corazón débil, pero la negativa de Bliuvaitė a regodearse en las desgracias de sus protagonistas o enterrarlas en la miseria le da a 'Toxic' una energía convincente y rebelde
El disfrute de la película radica en descubrir de qué manera la protagonista enfrentará sus desafíos. Esto culmina en uno de los finales más gratificantes que se han visto este año.