Will Smith está impresionante. 'Concussion' es una de esas raras producciones de estudio de Hollywood que realmente tiene el potencial de marcar la diferencia.
Es el tipo de secuela que hace que las secuelas parezcan malas. Una propuesta repetitiva y superficial que desperdicia el talento de Ryan Reynolds, Samuel L. Jackson, Salma Hayek, Morgan Freeman y Antonio Banderas.
Presenta un artificio narrativo bastante sólido. 'The Hitman’s Bodyguard' cuenta con un encanto modesto que logra captar la atención a pesar de su estructura un tanto lenta. No se trata de un clásico del género de acción, pero sin duda es una opción entretenida para disfrutar en el cine.
Con unos magros 91 minutos, esta película de acción implacable, ultraviolenta y descaradamente 'pulp' ofrece exactamente lo que su hiperactivo tráiler promete.
Un buen ejemplo de un resurgimiento de una marca que está bien hecho. No es un nuevo clásico del género, pero es ligera, entretenida y con frecuencia un entretenimiento inteligente para niños.
Es un claro ejemplo de que la fusión de elementos no siempre resulta en algo mejor. Si bien se puede disfrutar de manera superficial, comete ciertos errores que ya hemos visto en otras películas del Universo Marvel.
No está claro si esto marca el final o el inicio de algo nuevo. En cualquier caso, esta entrega permite que la destacada franquicia de terror se mantenga erguida con orgullo.
Es un avance significativo respecto a las dos últimas entregas de 'Terminator', gracias a su adherencia a una fórmula probada. Sin embargo, logra destacar principalmente durante su segmento del medio.
Si disfrutaste de las películas anteriores, seguramente te encantará esta. Presenta una producción robusta, algunas escenas de acción destacables y un elenco comprometido que se esfuerza por enriquecer el contenido.
Ver una película basada en un videojuego que no cumple las expectativas es habitual, pero 'Assassin's Creed' logra llevar esa experiencia a nuevas alturas.
El desarrollo es excesivo y se vuelve repetitivo, casi cómico. Sin embargo, el notable giro hacia el final y la atención en el personaje de Cyborg hacen que todo el revuelo que la rodea realmente valga la pena.
Un homenaje que resulta exagerado e irregular. Presenta un ritmo entrecortado y fragmentario, oscilando entre largos diálogos y silencios incómodos. Carece de acción y violencia, lo que lo hace poco atractivo.