Una de las mejores películas del año. Marder opta por permitir que la historia fluya de manera orgánica y se evita forzar giros o clichés melodramáticos.
Justin Lin demuestra su destreza para crear escenas de acción impactantes, aunque a veces carecen de cohesión. Además, la historia tiende a caer en el melodrama, lo que le resta fuerza.
Una película tan desastrosa que su único atractivo es comentar sobre ella más tarde. Después de los primeros 30 minutos, es evidente que carece de cualquier contenido interesante.
Otra película olvidable de Woody Allen que presenta una serie de clichés característicos. Está afectada por chistes forzados que interrumpen un relato marcado por la melancolía y la oscuridad.