Las malas noticias son que sus peores instintos se hacen evidentes desde el principio. Sin embargo, si logras pasar el tedio inicial, podrás disfrutar de que los episodios posteriores muestran una clara mejora.
[Crítica 1ª temporada]: No será el espectáculo más profundo que hayas visto sobre la crisis de los cuarenta, ni el más dramático, pero si te apetece relajarte en aguas cálidas y tranquilas con un adorable grupo de bichos raros, te encantará
En cuanto a su filosofía de vida, encaja con lo que hemos llegado a entender tanto de su carácter escurridizo como de su autoconciencia. Sin embargo, como aproximación a su retrato televisivo, deja mucho que desear.
[Crítica 2ª temporada]: la segunda temporada se beneficia de todo el trabajo preliminar que dejó la primera. La mejor sorpresa es que resulta ser más emocionante de lo que jamás había sido.
Es complicado conectar emocionalmente con personajes tan superficiales. Sin embargo, por esta misma razón, la película resulta ideal para disfrutarla como una simple distracción, sin necesidad de pensar demasiado.
Si la mayor preocupación de Santa Claus es que no hay suficiente magia navideña en el mundo, parece improbable que esta tibia serie sea el regalo que la vaya a traer de vuelta.
Hay sombras de 'American Psycho' en su ácido sentido del humor, y de 'Hannibal' en su gusto por lo lujurioso, pero Mimi Cave, en su debut como directora reúne estas influencias en una película que hace justicia a su título.
En parte parodia del mundo del espectáculo y en parte drama romántico, se tambalea torpemente entre sus dos modos sin asentarse en un único tono cohesivo. Afortunadamente, tiene el suficiente encanto para hacerte sonreír, incluso mientras sacudes la cabeza ante sus errores.
Retrato de un mundo que cambia rápidamente, documentando la carnicería emocional que queda a su paso, con un efecto apasionante, preocupante y, en última instancia, bastante conmovedor.