Lo que se ha presentado como un drama de ciencia ficción sobrio y clásico es, en realidad, un regreso inteligente, estimulante y deslumbrantemente divertido a las aventuras clásicas del pasado.
Infantil, fetichista y dolorosamente literal, el experimento de Luhrmann muestra una vez más que el estilo de Fitzgerald es lo que ha hecho grande a 'Gatsby'.
Snyder intenta elevar el espectáculo con un incremento de explosiones y accidentes. Sin embargo, el resultado es un género que ha alcanzado un punto de agotamiento.
Un magnífico entretenimiento familiar, una comedia de acción al nivel de 'Night at the Museum' (Noche en el museo) y 'National Treasure' (La búsqueda).
Dentro del núcleo de 'Mysterious Skin' se esconde una terrible y aterradora verdad que será fácilmente reconocible para aquellos que la han sufrido, e importante de reconocer para aquellos que no.
Apatow presenta un guión coescrito por Seth Rogen que, aunque no resulta particularmente cuestionable, se siente como una versión diluida de éxitos reconocidos como '40-Year-Old Virgin' y 'Superbad'.
Un drama iniciático aterradoramente sincero que destaca por la fuerza emocional de su narrativa. Es un impresionante debut como directora de Molly Manning Walker.
Dack ha creado un retrato inquietante de cómo se manipula y abusa de la confianza; sin embargo, la confianza que crea con sus personajes y el público se mantiene firme, logrando una película de una franqueza y un poder desarmantes.
Dirigida con sensibilidad y perspicacia por Alma Ha'rel, se presenta un retrato intenso e inquietante del artista en su juventud, que resulta ser modestamente satisfactorio.
Las dos tramas, Peter asumiendo las responsabilidades adultas que Tony le ha enseñado y su conexión con MJ, se desarrollan y entrelazan de manera ágil y efectiva.
Un estudio sobre la tiranía de la influencia en las redes y del pánico social. Pero también un retrato efectivo, compasivo e ingenioso sobre su antídoto.