El control tonal de Janiak, que sabe cuándo guiñar el ojo y cuándo mantener la seriedad, hace que este capítulo sea igual de efectivo, un final conmovedor para terminar una saga nueva victoriosa.
Ofrece ideas interesantes, pero su corta duración provoca que resulte sobrecargada. Las cuatro jóvenes destacan en sus actuaciones, aunque salvo Spaeny, ninguna de ellas logra contar su historia de manera efectiva.
Puede que el extraño argumento haga que 'Candy Cane Lane' destaque entre la insulsa y ajetreada multitud de nuevas películas navideñas, pero es tan floja y carente de espíritu como el resto de ellas.
Ni siquiera un reparto talentoso puede rescatar una película carente de gracia. El guion escasamente presenta frases o situaciones que logren hacer reír.
Un relanzamiento confuso y sin misterio de un clásico de la animación, que intenta, y no consigue, actualizar la fórmula, añadiendo un giro superheroico sin gracia.
Una película letárgica y emocionalmente vacía. Sería generoso afirmar que la caracterización del guion es escasa; en realidad, hay que decir que es inexistente.
Situar la excentricidad que gusta al público por encima de la autenticidad es un tropiezo frustrante que hace que el film no sea un descubrimiento milagroso sino un producto bien posicionado para recaudar.
Aubrey Plaza brilla en su papel, presentando a Ingrid con gran profundidad y complejidad. La película combina un humor irreverente con momentos de una tristeza profunda, creando una experiencia única.