Un futuro clásico de culto. Es admirable por negarse a bajar el ritmo, pero también te preguntas qué habría pasado si Kahn se hubiera atrevido a calmarse, aunque sólo fuera un poco.
Es complicado desentrañar las numerosas licencias extravagantes de la película. Todo resulta tan absurdo que carece de atractivo, inquietud o profundidad.
Aquellos que esperasen un trabajo modélico y con un agudo guion, pueden decepcionarse, pero habría que preguntarles en primer lugar qué hacen viendo una película llamada 'The Angry Birds Movie 2'.
La única gracia salvadora de las muchas travesuras de 'Lift' es que todo es tan confuso que no tenemos la oportunidad de darnos cuenta de lo terriblemente inverosímil que es todo.
Al presentar una versión algo ficticia del viaje de Assaf, el director palestino Hany Abu-Assad logra lo más relevante: 'The Idol' se aborda como un cuento, no como una historia verídica.
Es un retrato riguroso de ilusiones rotas que muestra cómo el asombro juvenil se transforma en terror y parálisis. John Malkovich hace una de sus mejores actuaciones.
Una historia poco desarrollada que a veces da la sensación de que lanza misterios y subtramas que no van a ninguna parte. Avery orquesta con habilidad algunas escenas macabras e intensas.
Enseña nuevas maneras de mirar. No solo observas estos clips, sino que también indagas entre y a través de ellos. Las yuxtaposiciones establecen conexiones vitales y cósmicas.
'A Bread Factory' tiene un reparto inmenso, un ritmo prudente y ambición temática para regalar, pero también tiene una modestia terrenal y sincera que la hace hipnótica.
El ecosistema de actitudes y comportamientos que se presenta en esta película es tan desesperantemente lúcido que es probable que muchos de nosotros terminemos retorciéndonos por lo admirable que es.