La película presenta calidad en sus elementos fundamentales, pero no logra profundizar en su trama convencional de wéstern ni en sus personajes típicos.
Es un espectáculo, en su gran mayoría cuyo impacto depende totalmente de sus impresionantes decorados, la cualidad física de sus actuaciones y los grandes efectos que la cámara consigue.
La dirección firme de Jules Dassin sostiene la tensión de la película. 'Brute Force' hace honor a su nombre, presentando una narrativa donde se toma la justicia en propias manos.
Funciona extraordinariamente bien, gracias principalmente a la espéndida puesta en escena de las partes judiciales por Billy Wilder y la intepretación teatral de primera clase por parte de Charles Laughton.
Una de las 10 mejores películas del año. Es una obra profundamente alegórica y curiosamente cautivadora. Sin duda, se trata de una experiencia hipnótica.
Con un guión débil, es comprensible que el Sr. Holden y la Srta. Jones se vean atrapados en un ciclo interminable, intercambiando palabras sin cesar y caminando juntos.
Los talentosos empleados de Disney parecen ser simplemente trabajadores comunes cuando se trata de narrar una historia con intérpretes en lugar de animaciones.
La inconsistencia de los cimientos de la película y el desorden de sus episodios provocan la inevitable impresión de que todo va cayéndose por el camino.
Una película que logra abordar las tradiciones militares de una forma precisa y elocuente. La dirección de Ronald Neame destaca por su brillantez, al igual que el trabajo de cámara en color. Las actuaciones también son sobresalientes.