Una comedia ligera y agradable sobre la pérdida, la pena, el amor y los lazos irrompibles entre padres e hijos. 'Dean' se siente más como un boceto que como un retrato completo, en parte porque la actuación de Martin no logra alcanzar la profundidad necesaria.
Shuts construye una insidiosa atmósfera de horror con el mismo naturalismo nervioso que el John Cassavetes tardío imprimió en películas como 'A Woman Under the Influence'.
Es la clase de película que te brinda la respuesta ideal para cuando tu madre o tu abuela te preguntan: ¿Qué podría ver con las chicas después de nuestra partida semanal de canasta?
Puede que no sea la mejor película de su género, pero desde luego sí que es la más desenfadada y delirante. Sus dos horas de duración se pasan volando.
La trama existencial de 'The Lobster' es completamente demencial. La premisa no debería funcionar en absoluto, pero lo logra de una manera maravillosa.
Cuando Levi aparece, la película adquiere una nueva dimensión. En esencia, es como si fueran dos películas en una: una protagonizada por Levi y otra por Strong. Disfruté mucho de la primera, mientras que me aburrí con la segunda.
Es un melodrama que aborda la intensa lucha por la custodia de un hijo, ofreciendo una experiencia emocional excesiva. La historia carece de sutilezas, resulta pesada en su desarrollo y se siente demasiado predecible.
'The Vatican Tapes' se presenta como una recopilación de los momentos más notorios de la temática del exorcismo, interpretados por un grupo poco sofisticado que no logra aportar nada novedoso.
Iba a iniciar con una reflexión sobre cómo cada generación tiene su adaptación de Godzilla. Sin embargo, no vale la pena. Simplemente, no es una buena película. En realidad, es especialmente mala.
'The Meg' no es tan impresionante como esperaba. Aunque los efectos especiales son solo regulares, la película resulta ser increíblemente entretenida de una forma absurda y romántica.
Un cuento de buenas noches inofensivo. Aquellos padres que esperen encontrar una versión moderna de 'E.T' para disfrutar con sus pequeños podrían sentirse algo desilusionados.
Salirse del cine con la sensación de estar flotando es algo poco frecuente. Sin embargo, cuando se experimenta, renueva la creencia en la magia del séptimo arte. 'La La Land' logra esa sensación excepcional, convirtiéndose en una de esas joyas cinematográficas.