Y tanto si el final decepciona como si no, esta sutil fusión entre 'Network' y 'Rosemary’s Baby' es una película ingeniosa y una muy buena opción para ver por la noche.
Una película sobre el agotamiento creativo y emocional que dice más sobre la fragilidad del alma, de lo que cualquier montaje de ventas de entradas o carteles de 'vendido' podrían generar.
Al contrario de lo que sugiere el título, la película no ofrece mucho más que una hermosa, aunque poco plausible, narración que ilustra los peligros de confundir la lujuria con el amor y de enamorarse de lo más áspero.
Schumacher maneja el drama con un control impresionante y no elude las verdades incómodas de este mundo violento. Presenta una interpretación profunda de una tragedia moderna.
La novedad de ver a Johnny Depp en su primer papel después del juicio despertará sin duda la curiosidad internacional, pero la película también cuenta con un reparto de peso que le apoya con creces.
Un recuerdo en primera persona, con fragmentos extraídos de muchos años de entrevistas televisivas del cantante, intercalados con sorprendentes imágenes en directo que ponen de manifiesto su increíble versatilidad.
Ciertamente es convincente como una película de gángsters muy moderna, con un uso estupendo del rap y el R&B como instrumento para domar a una bestia salvaje.
Zahler demuestra un talento notable para la acción, ofreciendo escenas que son tanto originales como despiadadas. Sin embargo, el comportamiento monótono de sus personajes se está volviendo cansino.