Una joya etérea lista para ser redescubierta. El debut de Keene revitaliza un cuento de hadas hiper-violento, cuestionando la misoginia que defiende su orden moral.
Ryan Reynolds y Samuel L. Jackson no pueden salvar esta débil película de acción. Tiene tantas ganas de convertirse en una franquicia que no se atreve a arriesgar como película.
Kiet se esfuerza por crear algo innovador, pero las peleas resultan demasiado torpes para trascender el nivel de una simple atracción de parque temático.
Simplemente, el material no es lo suficientemente sólido o interesante para sostener un reparto tan rico como el que ha reunido Simien. Son 123 minutos de tono en búsqueda de forma.
Emerge del leve tedio de su segundo acto y se adentra en la amable cohesión de sus capítulos finales, que hacen girar el tiempo y derriten suavemente el corazón.
'Riddle of Fire' intenta plasmar la magia inherente a la infancia moderna, convirtiendo una simple búsqueda en una aventura épica. Quizá en exceso épica.
¿Para quién es esto? es una pregunta que surge en el cine cuando la película no logra establecer una conexión clara con su audiencia. 'Leo' queda atrapada en la ambigüedad, sin definir si se trata de una historia para niños centrada en sus padres o una narrativa para padres enfocada en sus hijos.
El director de 'Pete's Dragon', David Lowery, vuelve a mostrar a Disney cómo se hace. Una película sencilla pero entrañable sobre la aceptación del cambio.
Por encima de todo, el film es un cándido y adorable añadido al creciente subgénero de cine de animación para niños que tratan temas como el dolor que produce la pérdida de un ser querido.
Es difícil imaginar a un niño recordando 'The Nutcracker' al llegar a casa después de verla en el cine. Puede que Clara logre salvar los cuatro reinos, pero ninguno de ellos tiene mucho porvenir.
Un tipo de producto casero con el sabor idóneo para gustar a todo aquel que tenga ganas de probarlo; esta modesta producción de Apple+ sólo desafía las expectativas al ceñirse a sus puntos fuertes.
Una película tierna, pero de una sola broma. Para una película que celebra la imaginación como vía de escape, esta comedia poco entusiasta no tiene la energía creativa requerida para no caer en sus propias trampas.